Un sitio muy pintoresco para ir a comer o cenar. Se trata de vagones antiguos restaurados, concretamente en el que estuve yo era de 1931. Por otro lado, se podría[…]
Trato excelente, comida impecable y entorno maravilloso. Durante el viaje gastronómico, el tren se pone en marcha y tambalea, toda una experiencia para el paladar y los sentidos, ¡100% recomendado!